domingo, 20 de agosto de 2023

Como niños

Zelenski acaricia los F-16 desde Países Bajos y Dinamarca

Joana Serra

La gira de Volodímir Zelenski por Suecia, primero, y Países Bajos, a continuación, se llevó al menos una de las recompensas anheladas por el presidente ucraniano: el compromiso expreso de La Haya y de Copenhague de que se le suministrarán los cazas F-16 que Kiev reclama para su Defensa.

Un día después de presentarse en Estocolmo para pedir al gobierno de Ulf Kristersson que acelere la entrega de los aviones de combate Gripen, de fabricación sueca, Zelenski se plantó el domingo en Eindhoven, la planta donde Países Bajos tiene sus F-16. Era su segunda estación en la ronda de “visitas de trabajo sorpresa” realizadas este fin de semana. En la base de Eindhoven se hizo incluso un selfie con el primer ministro neerlandés interino, Mark Rutte, ambos sonrientes con uno de los aparatos al fondo.

Y a continuación surgió el comunicado, primero del gobierno neerlandés y luego el correspondiente del danés, ambos en la misma dirección. Ucrania tendrá los cazas “tan pronto como sea posible”, confirmó más tarde Rutte, aunque sin concretar cuántas unidades. Países Bajos los entregará a Kiev una vez completado el entrenamiento de los pilotos ucranianos, puesto que ello es “crucial” para su manejo. Ello significa que no contribuirán a corto plazo a la defensa de Ucrania.

Países Bajos tiene actualmente 42 cazas de este modelo, precisó Rutte. El propio Zelenski admitió que el monto final de los que se enviarán a su país dependerá de Dinamarca. “Tendremos una conversación adecuada con nuestros aliados daneses próximamente”, aseguró el líder ucraniano.

Zelenski lleva prácticamente desde el inicio de la invasión rusa a su país, en febrero del año pasado, asegurando que precisa cazas occidentales.

Sin embargo, tanto Washington como otros grandes aliados habían respondido hasta ahora con ambigüedades. En el caso de F-16, de fabricación estadounidense, corresponde dar esa licencia a Washington. La administración de Joe Biden compartía con la alemana del canciller Olaf Scholz las prevenciones contra esas entregas. Pero en los últimos meses las entregas de material militare se han hecho más y más contundentes, mientras desaparecían una tras otra sucesivas “líneas rojas”.

Se despejó algo el camino al mostrarse Países Bajos y Dinamarca dispuestos a entrenar en su territorio a pilotos ucranianos, algo imprescindible para el suministro. Pero desde Kiev se admitía hace unos pocos días que por el momento no se cuenta con la entrega efectiva su país vaya a realizarse este año.

“Hoy se concretó algo fundamental. Estarán en el cielo ucraniano. Gracias, Países Bajos. Gracias Mark. Es el principio”, afirmó Zelenski aún desde la base neerlandesa. Hasta lograr ese objetivo, el gobierno de Copenhague buscará aún otros aliados dispuestos a participar en la llamada coalición de los F-16. Entre los países que disponen de estos aparatos y que se han mostrado dispuestos a cederlos se encuentra Bélgica, con 44 aparatos. Otros socios europeos con este caza en sus fuerzas aéreas con Grecia, Portugal, Turquía, Polonia y Rumanía.