sábado, 24 de marzo de 2012

El Faktor Oskar

El Sarre, un test alemán que apunta a empate entre Merkel y socialdemócratas


Gemma Casadevall


Berlín, 24 mar (EFE).- El "Land" alemán del Sarre, fronterizo con Francia, elige mañana su nuevo Parlamento regional, el primer test directo en las urnas en este 2012 donde todo apunta a un empate entre los conservadores de Angela Merkel y la socialdemocracia, así como a un hundimiento de los liberales, los socios de la canciller.
Los sondeos sitúan a la Unión Cristianodemócrata (CDU) y al Partido Socialdemócrata (SPD) en el 34 %, lo que para la formación de Merkel supone un receso de medio punto respecto a los anteriores comicios en ese "Land" y para su rival un aumento de diez puntos.
La constelación más probable para el nuevo gobierno regional es una gran coalición, con la incógnita de cuál de las dos formaciones será la ganadora y la que designe al primer ministro.
A un año de las generales de 2013, se da asimismo por hecho que el Partido Liberal (FDP), socio de Merkel en Berlín, quedará relegado a extraparlamentario con un 2 % -del 9,2 % logrado en 2009 en ese "Land-, y que los Piratas consolidarán su emergencia.
Para el FDP será un nuevo desastre en su persistente caída y presumiblemente no el última, ya que se le vaticinan porcentajes marginales en las dos siguientes regionales -en Schleswig Holstein y en Renania del Norte-Westfalia, el 6 y el 13 de mayo-.
A Los Piratas, una formación de nuevo cuño basada en la libertad en internet, se les pronostica exactamente lo contrario: la entrada en la cámara del Sarre, con un 6 %, y en las dos que le seguirán.
Será un espaldarazo a su aspiración de llegar al Bundestag (Parlamento federal), después de que en 2011 lograran sus primeros escaños en la ciudad-estado de Berlín, con un 8,9 % de los votos.
Al FDP se le augura un vía crucis que desembocará salvo imprevistos con su adiós al Bundestag, lo que dejaría a Merkel sin un teórico socio natural que en esta legislatura le ha dado más problemas que alegrías.
Los Piratas no se perfilan, hoy por hoy, como posible aliado de gobierno, tampoco a escala regional, sino como revulsivo para la oposición, mientras las restantes fuerzas minoritarias se recolocan.
A Los Verdes, que en los anteriores regionales del Sarre obtuvieron un 5,9 %, se les ve ahora en la cuerda floja del 5 %, mínimo para lograr representación parlamentaria.
A La Izquierda se le pronostica asimismo una fuerte caída de votos, del 21,3 % de 2009 a un 15 %.
Esta formación, aglutinante de la disidencia socialdemócrata y el poscomunismo del este de Alemania, depende en estos comicios del llamado "Faktor Oskar", en alusión a su líder Oskar Lafontaine.
Al veterano político se le apoda el "Napoleón del Sarre" por la etapa en que fue jefe del gobierno del "Land" -de 1985 a 1998-.
Lafontaine es hombre de biografía convulsa, al que no detienen ni las sacudidas personales -como el atentado sufrido en 1990, siendo candidato a la cancillería, por una perturbada mental- ni las guerras internas.
En 1998, siendo líder del SPD y ministro de Finanzas de Gerhard Schröder, dejó intempestivamente ambos cargos, por disentir de la línea centrista del entonces canciller socialdemócrata.
El SPD nunca le perdonó el doble abandono y su líder local, Heiko Maas, ha rechazado reiteradamente la posibilidad de una alianza de gobierno con La Izquierda, como alternativa a una gran coalición.
Lafontaine vuelve a la vanguardia desde su "Land" tras haber superado un cáncer y convertido en pareja sentimental de Sarah Wagenknecht, representante del ala más comunista de la Izquierda.




El presumible naufragio liberal, la emergencia pirata y el "Faktor Oskar" serán tres de los aspectos a analizar de cara a las generales de 2013 en el Sarre, un "Land" con 800.000 electores inesperadamente convertido en barómetro electoral.
Los comicios del Sarre se celebran anticipadamente, tras romperse la coalición que lideraba Annegret Kramp-Karrenbauer, de la CDU, apuntalada en el FDP y los Verdes.
Se trataba de la primera experiencia con este tripartito en Alemania, que recibió el exótico nombre de "Jamaica" por identificarse los colores de los partidos -negro, para la CDU, amarillo para el FDP, más verde- con la bandera de la isla.
Las elecciones de Renania del Norte-Westfalia, el "Land" más poblado de Alemania, serán también por anticipado, tras la disolución de su cámara por no haber logrado el gobierno en minoría, socialdemócrata-verde, el apoyo preciso a sus presupuestos. EFE
gc